Con el cuestionado fallo que beneficia a los asesinos del grupo Colina, la Sala Plena de la Corte Suprema que preside el repudiado magistrado Javier Villa Stein, lo único que ha hecho es provocar la más grande indignación del país y el repudio colectivo jamás visto en la historia jurídica peruana.
Con este fallo inconstitucional, según lo afirma el ex presidente del Tribunal Constitucional Javier Alva Orlandini, el poco prestigio que tenía la Corte se ha ido por los suelos y sus magistrados lo único que han logrado es hundirse más en el estiércol.
El inefable Villa Stein quien, por su proceder, se asemeja al Guasón de la serie Batman, porque está más al lado del mal que del bien, y según parece no solo tiene seguidores en Colorado sino también en Lima, de manera cínica y desafiante dice que los delitos orquestados, planificados y ordenados por la camarilla fujimontesinista y ejecutados por el grupo Colina, no son delitos de lesa humanidad, sino comunes.
¿Qué se puede esperar de este sujeto provocador que se siente orgulloso de su origen alemán (seguramente de la época de Hitler) que según lo revela La República, en su edición dominical, no es la primera vez que emite un fallo vergonzoso?. El 2004 le concedió la semilibertad a Ernesto Gamarra, aplicando beneficios que habían sido descartados por el Tribunal Constitucional, un año después ratificó un fallo que afirmaba que falsificar firmas no era un delito de falsedad material, ideológica ni genérica, permitiendo la inscripción de la agrupación fujimorista Perú 2000, al año siguiente Villa Stein y otros vocales declaran nulo un fallo que condenaba a Absalón Vásquez y Hurtado Miller por haber recibido de Montesinos 249 mil dólares para la campaña municipal y el 8 de junio del 2004, la Corte Suprema anuló el proceso en contra de Dionicio Romero, propietario del Banco de Crédito por tráfico de influencias y por haberse reunido con Montesinos para favorecer a sus empresas.
En entrevista a un medio televisivo matutino, Villa Stein, no tuvo reparos de enfrentarse al ejecutivo y cuestionar las opiniones del propio mandatario y hacerse el sueco de la mofa de Vladimiro Montesinos que ya sabía del fallo antes de hacerse público y publicarlo a través del twiter. El diario menciona, asimismo, que de acuerdo a una fuente próxima al ex Presidente del Poder Judicial Francisco Távara, este mal magistrado le pedía que lo llevara a sus reuniones con Alan García en Palacio e Gobierno. Quería conocerlo a como de lugar. Luego de lograr su propósito, sus coqueteos con el aprismo fueron evidentes.
Felizmente que la cosa no está del todo dicha, el ministro de Justicia anunció que la Procuraduría Pública presentará una acción de amparo contra la sentencia que rebaja las penas al grupo Colina, emitida por la Sala Permanente de la Corte Suprema.
De otro lado, se viene convocando a un plantón frente a palacio de Justicia para dar a conocer el repudio contra esta sentencia sesgada que, por cierto, no tiene otra intención que abrir una puerta falsa a los reos Montesinos y Fujimori en sus planes para conseguir también una rebaja en sus penas aunque, según aseguran algunos juristas, en el caso del chino ya no se podría porque sus sentencias son cosa juzgada. Pero como la plata lo mueve todo y ambos personajes todavía tienen en su poder varios cientos de millones robados al país, son capaces de hacer torcer los codos más duros y abrir los puños más cerrados.
Por eso es menester que todos los defensores de los Derechos Humanos y la legalidad nos mantengamos alerta para que no nos hagan tragar sapos y culebras sin que nos demos cuenta, tal como lo pretendió el Guasón peruano Javier Villa Steins, arrasando con toda la jurisprudencia y burlándose hasta de la Corte Internacional de Derechos Humanos. Estoy casio seguro que esta burla no quedará sasí porque no creo que la Corte Interamericana se quede de brazos cruzados. Tengamos paciencia, la justicia tarda, pero llega.