Así como la papa, tubérculo originario de Perú, salvó de la hambruna a millones de habitantes después de la Segunda Guerra Mundial, la quinua se convertirá seguramente en el alimento clave en la lucha contra la desnutrición que aún padecen millones de personas en pleno Siglo XXI, especialmente de niños y ancianos.
En diciembre del 2011 la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), a propuesta de Bolivia, declaró el 2013 como el Año Internacional de la Quinua con el respaldo de 130 países entre ellos Perú. La ONU (Organización de las Naciones Unidas) ratificó esta declaración y este miércoles 20 de febrero lo lanzará oficialmente en su sesión de apertura que tendrá lugar en su sede de Nueva York, reunión en la que serán investidos, la primera dama del Perú Nadine Heredia y el Presidente de Bolivia Evo Morales, como Embajadores Especiales de la FAO para el Año Internacional de la Quinua, en homenaje al llamado «Grano de oro andino». La designación de Nadine Heredia es en reconocimiento a su compromiso en diversas causas sociales y humanitarias y por su firme voluntad de alentar los esfuerzos para alcanzar un mundo sin hambre.
La preocupación de la primera dama por fomentar el consumo de la quinua no es de ahora. Apenas su esposo asumió las funciones de Presidente de la República estuvo en el “Festiquinua 2011” organizado por la Región Puno. Desde entonces no desmayó en alentar su cultivo y sobre todo su consumo, apoyo que hay que reconocer porque la quinua es una planta originaria de Perú y Bolivia y forma parte de la alimentación diaria de las comunidades indígenas alto andinas. Por algo los incas lo llamaban “el grano madre”.
Lamentablemente con la llegada de los conquistadores, el producto fue relegado para introducir otros productos traídos de Europa. De no ser por la preocupación de algunos campesinos que lo seguían cultivando, incluso de manera reservada, la quinua se habría extinguido. Felizmente que más pudieron sus costumbres alimenticias que el temor a las represalias de los conquistadores.
La quinua crece donde otros productos no crecen, en zonas frías y áridas por encima de los 3 mil metros de altura y algunas variedades puede resistir el candente sol de la coosta. Experimentos genéticos en la Universidad Agraria han permitido adecuarla a distintas latitudes y a otros climas. Frente a la crisis de agua y el cambio climático, unas veces con granizadas y otras con sequías, la aquinua resulta siendo una valiosa planta alternativa para hacer frente a la crisis alimentaria. Por eso hay que apoyar todos los estudios sobre mejoramiento genético que se hagan para mejorar las distintas variedades. Es la esperanza de millones de niños que padecen de hambre y una gran oportunidad para las familias de nuestros andes de salir de la pobreza, cultivando este insuperable alimento.
Este grano de oro andino puede convertirse en el alimento salvador del mundo por sus propiedades alimenticias. Decir esto no es una exageración. La quinua es el alimento más completo, superior a la leche, la carne y el pescado. Estudios recientes demuestran que puede incluso reemplazar a la leche materna por su alto contenido de vitaminas, hierro, fósforo y calcio y por tener el doble de proteínas que cualquier otro cereal, así como aminoácidos esenciales para el desarrollo. Es un producto de fácil digestión, bajo en gluten y sin colesterol. Favorece a la reparación celular y a la formación de anticuerpos, actúa en la regulación de la hormona del crecimiento y la reparación de las articulaciones. Por su alto contenido en Omega 3, 6 y 9 ayuda a reducir el colesterol y previene el cáncer, es un gran antioxidante y favorece al sistema inmunológico, evita la descalsificación de los huesos, regula el agua en la sangre, mantiene la piel y nervios, favorece a la visión, retarda la metástasis cancerosas, elimina toxinas, retarda el envejecimiento y previene la osteoporosis y la diabetes.
Está demostrado que la quinua es, igualmente, ideal para el mejor rendimiento de los deportistas, para los niños hiperactivos y mujeres embarazadas. Es tan buena que hasta la NASA la ha incluido en la dieta de sus astronautas. Y como si esto fuera poco, en 1975 la Academia de Ciencias de Estados Unidos la ha declarado como “el mejor alimento de origen vegetal para el consumo humano”.
Esta designación del 2013 como El Año Internacional de la Quinua por las NNUU es un justo homenaje a los habitantes de los andes por su afán de conservar la especie a pesar de la falta de apoyo. Esperamos que a partir de ahora sea diferente el comportamiento de los organismos del estado, especialmente el Ministerior de Agricultura porque, tal como lo señalé al principio de este comentario, la quinua salvará la desnutrición del mundo siempre y cuando las naciones productoras tomen conciencia de su gran valor nutritivo, alienten su cultivo orgánico porque tiene mayor aceptación, y difundan sus bondades. Se necesitan políticas de protección y promoción para su cultivo masivo. Y es precisamente la ONU la que debe tomar la iniciativa para dirigir esta gran cruzada.
En Perú debemos sentirnos afortunados por ser el primer productor de este alimento. Al 2012 la producción superó las 46,300 toneladas, (El 75% de esta producción está en Puno) cantidad que todavía resulta siendo muy poca para la gran demanda que se abrirá, mientras que bolivia produjo 38,257. Entre el 2008 y 2012 la quinua peruana creció en más de 143%. Los mayores cultivos después de Puno están en Cusco y Apurímac. Y ojala sigamos por ese camino de crecimiento para que nunca más haya en el mundo niños que se mueran de hambre.
El gobierno está en la obligación de organizar a los pequeños productores para que en forma asociativa puedan enfrentar a los retos de la demanda mundial. Actualmente trabajan en tierras muy pequeñas y son objeto de abusos por parte de los intermediarios. Y, asimismo, a corto plazo será necesario proporcionarles nuevas tecnologías para que sus productos tengan un mayor valos agregado. Actualmente los campesinos ya producen más de cincuenta tipor de alimentos transformados que derivan de la quinua. Igualmente, nuestros chefs deberían contribuir a su consumo ideando nuevos y más exquisitos platos teniendo como base este excelente producto, como ya lo están haciendo Gastón Acurio y otros cocineros.
Hay que ayudar a nuestros agricultores para bajar los costos de producción porque los gastos en las etapas de cultivo y cosecha son muy altos, las semillas son muy pequeñas y la planta es invadida por malezas. Esto desalienta a los propietarios de tierras, por eso en algunas zonas prefieren cultivar papa y cebada.
Nos parece bien que Nadine Heredia haya aprovechado su viaje a las Naciones Unidas para divulgar entre los empresarios estadounidenses las bondades de este producto y hacer una invocación para invertir en la producción de este nutritivo alimento por tratarse de un producto con amplias posibilidades de comercialización en todo el mundo. «Es una inversión rentable y segura porque es un alimeno que forma parte de esta nueva corriente de vida saludable que va ganando cada vez más adeptos». Dijo. Para luego añadir «Este Año Internacional de la Quinua nos debe ofrecer a todos, sobre todo a los productores, grandes beneficios». «Juntos podemos lograr que la mayor demanda de mayores ingresos y mejor calidad de vida a los agricultores».
Uno de los platos más deliciosos es el tecse, una sopa preparada a bese de quinua, igualmente el guiso y las tortillas.También se puede preparar cebiche, innovación lanzada por el chef José Luis Higashionna. La quinua se vende en hojuelas, harina instantánea, granola y en barras energéticas. En cuanto al menú, seguramente que nuestros chefs pondrán toda su imaginación para ofrecernos las más exquisitas variedades dentro de la cocina novo andina y así contribuir con la misión de difundir este alimento y a la vez satisfacer los paladares más exigentes del mundo.
Felicitaciones al Gobierno de Bolivia por el logro de esta designación en las NNUU y a las otras naciones que, como el Perú, Argentina, Azerbaiyán, Ecuador, Georgia, Honduras, Nicaragua, Paraguay, Uruguay y la FAO, apoyaron esta iniciativa.